miércoles, septiembre 03, 2008

Frases desordenadas de la Argentina oculta

"Mi experiencia de convivir con Otros, muy remotos, durante largos años me ha enseñado que la buena disposición hacia otro ser humano es esa única base que puede hacer vibrar en él la cuerda de la humanidad".
Ryszard Kapuscinski
1. Los últimos días fui devorado por la Argentina profunda. Salí de Buenos Aires en busca de contar cómo la gente vive sin agua en el Chaco, un poco para el diario (podés ver texto, un poco mejor escrito, y fotos aquí) donde escribo y otro para una investigación más interesante; una pretensión periodística, social y antropológica que imaginamos lograr con una fotógrafa amiga.
2. Chaco es un lugar estremecedor. Bastan apenas unos kilómetros afuera de Resistencia para que toda una joven y triste historia nacional duela (también duele la Villa 31, pero la lejanía te saca esa costra que la ciudad te hace crecer sobre la piel para evitar que todo, siempre, te afecte demasiado). Allí, en pueblos del sudoeste de la provincia, en los bordes, cerca de Santiago y Santa Fe, el contraste puede hacerte mal. Hay gente de una pobreza inimaginable, en sus casas de tres por tres donde viven siete, ocho, diez, sobre piso de tierra y sin agua, sin trabajo pero con dignidad.
3.También está Charata, un pueblo extraño. Bucólico, como todo por ahí. El sol se estrella y parece que no hay sombras. Hace calor y la sequía llena todo de polvo. Las camionetas sojeras (4x4 ultra lujosas) desfilan por las calles asfaltadas. La entrada a Charata impacta. Sobre cada costado están construyendo dos mansiones como nunca jamás vi, ni en San Isidro, ni en Nordelta. Se parecen menos a las casas de Punta del Este que a los palacetes del siglo XIX de Buenos Aires o París. Da asco. En una de ellas me abrió la puerta su dueño.
4.Bajo la condición de no darnos su nombre ni dejar que le saquemos fotos a él ni a su casa (enorme, fresca, entera en una manzana para él, su mujer y sus dos hijitas rubias y regordetas) empezó a hablar. Contó cómo evade impuestos, cómo arregla las "cosas" con el gobernador Capitanich, cuánto le paga a determinados periodistas (algunos de ellos pasaron delante de mi escritorio hace un rato), de la responsabilida de los agropecuarios en el clima porque desmontan el país para plantar soja, y también de cómo tira los agroquímicos y cómo estos afectan la misma agua que toman sus hijas.
5.Lo que no contó, seguramente porque no le dio la cara, es que él fue uno de los que cortó las rutas en estos 180 días de "el pueblo con el campo". El, que paga el sueldo de un jugador yanqui de basquet del equipo de Charata ("10 mil pesos nomás para el negro", me dijo).
6. En Charata entendí un poco más lo poco que le importa la pobreza a los dueños del país. Lo poco que le importa el Otro. Alguien me contó que el intendente de Río Bermejito (en el Impenetrable, donde hay una gran colonia wichi), un filonazi, llevó agua para paliar la sed en un camión atmosférico. Y el hombre que me abrió su mansión hablaba de la sequía al borde de su pileta llena. Al otro día de publicada la nota, un señor que no entiende nada me escribió un mail diciéndome que la tragedia era que los de Charata no tuvieran gas natural para calefaccionar sus piscinas. Todo eso un rato después de que un chiquito me mirara extrañado (tal vez sólo se reconociese reflejado en el lente oscuro de mis anteojos de sol) y descalzo mientras su abuelo me contaba que tomaban agua de pozo contaminada con arsénico.
7. Un poco de eso es Argentina.

6 comentarios:

Victoria De Masi dijo...

Sabemos, por razones que pasan delante de tu escritorio, que siempre quedan cosas por contar. Y éstas, las que te guardaste para tu espacio, merecían ser dichas. Lo que queda en el aljibe --este reservorio de observaciones-- sí que es venenoso. Te seguimos leyendo.

Anónimo dijo...

Lo que vi en el diario, muy bueno. Y esto, mucho mejor. Ayuda a sacarse la costra de la ciudad.

Cuiz dijo...

Aterrador, desoladamente aterrador (ya lo había visto en tele). Citando a un capo y encontrándome con mi lado sartriano, me pregunto.. que carajo hago escribiendo frente a esta computadora? Me espera una noche dura. Lo que invita es bueno, siga Ferito.

"La vida es muy peligrosa. No por las personas que hacen el mal, sino por las que se sientan a ver lo que pasa." Albert Einstein

Diego Sagardía dijo...

La combinación de datos, tu ojo para percibir y sentir, y tu forma de escribir, son tremendas. No hay subjetividad en el comentario, a bancarse los elogios nomás. Grosso, Ferito.

alicitis dijo...

La Argentina, se necesita creer, también son los que pueden contarlo e indignarse. Y quizás seguir pensando que los sueños se van a realizar. Alguna vez ya lo dije aca: gracias. Lo digo otra vez.
A

N. dijo...

el Chaco.
Ese amigo herido que tengo...muy pocos recuerdan su cumpleaños, y los que lo hacen, jamas lo llaman ni visitan, no les interesa darle, al menos, una palmada de apoyo.
Haber habitado sus calles, hace aún más doloroso todo esto que contas...